0 elementos
+34 628059600
ELISA VALGANGIACOMO

Hilo(s) rojo(s)_3 – Irene Fabra

Información adicional

Peso 200 kg
Dimensiones 50 × 50 cm
Color

Blanco, Negro, Rojo

Estilo

Abstracto, Figurativo

Soporte

Papel

Técnica

Tinta china y bolígrafo

250,00

Hay existencias

La primera frase que describe de qué iba a tratar la exposición, cuando Sara nos dio todos los detalles, era: “Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar o contraer, pero nunca romper”.

En esa frase hay futuro y presente. Mi hilo rojo habla del pasado. “Sin importar tiempo, lugar o circunstancia”, “(…) pero nunca romper”. ¿Cómo hablar de un hilo que nos conecta a un ser querido de forma mágica, que no se puede romper y no pensar en los que ya no están?
Siento que no hay nada más que nos conecte entre nosotros que los recuerdos. Propios y adquiridos. Los sitios donde has ido, los sitios a donde siempre será duro volver. El pueblo de tu abuela al que nunca has ido, pero el que sabrías recorrer sin perderte. Los viajes que querría haber hecho esa persona que ya no está. El tren que coges y el espacio entre las nubes que sobrevuelas para (re)encontrarte con los que sí.

Todos esos lugares están plagados de todos nuestros hilos rojos. Porque me niego a creer que hay solo uno. O por lo menos en mi imaginario personal hay muchos hilos rojos, hay muchos tipos de amor que destacan por encima de un paisaje en blanco y negro algo difuso. Un paisaje onírico, impreciso; como la técnica oriental Sumi-e. Una técnica monocromática muy particular que no busca el detalle y la precisión sino, más bien, la expresión desde la sencillez y la confianza. Desde dentro.
Estos hilos rojos se pueden ver cuando encuentras una foto que no recordabas, viajas al pueblo, escuchas una canción o pasas por aquella calle. Solo tienes que mirar al cielo y fijarte bien.